Me he levantado pronto y, antes de marcharme para la estación de Príncipe Pío donde se cogen los trenes para Segovia, me he curado el dedo.
Aquí lo tenéis, en todo su esplendor:
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Ya os contaré sobre el viaje al volver.
Bien, hemos salido en el bus de “La Sepulvedana” hacia Segovia a las 10:30h. Sale de la estación de buses del Paseo de la Florida (número 11, enfrente de Príncipe Pío, donde justo ayer mataron a un chico :S –entre lo cutre y decadente que es y eso… ¡qué mal rollo!-). El billete ida y vuelta no llega a 12€ y te deja en la estación de buses de Segovia.
Al llegar hemos ido a la oficina de turismo y hemos empezado nuestra ruta. No voy a pararme mucho contándolo para no aburrir, pero sí que voy a decir que me parece una ciudad muy bonita y cuidada. Eso sí, se aprovechan del “Patrimonio Histórico-Artístico” y cobran por todo lo visitable. Lo único que es gratis es el acueducto, y porque no tiene puertas ni nada, sino también cobrarían.
La ruta ha sido la siguiente:
Iglesia de San Millán (iglesia atípica románica).
Avenida Fernández Ladreda hasta el Acueducto (la inmensa mayoría de las casas tienen la fachada decorada con elementos ornamentales entre judíos y árabes, no sabría decir, esculpidos en la pared).
El Acueducto, del s. I d.C., tiene 14Km de largo, pero sólo el último está a la vista y con arcos (el resto es subterráneo). Además ninguna sustancia hace de masa para juntar los bloques de piedra del monumento, es decir, están las piezas de granito puestas unas encima de otras y punto.
Entrada a intramuros. Casa de los Picos (palacio del s.XV, en la plaza del platero Oquendo –mofa con nuestro amigo Alberto, ya que es su segundo apellido y nombre por el cual todos le conocemos-).
Calle Juan Bravo e Iglesia de San Martín (estilos mozárabe y románico).
Convento del Corpus Christi, antigua Sinagoga Mayor y paseo por la Judería (los judíos poblaban la zona hasta 1492 que fueron expulsados o se hicieron conversos).
Catedral y Plaza Mayor.
Calle Daoiz hasta el Alcázar (hay un museo de brujería, un convento y una iglesia por el camino).
Parada y fonda en el jardín del Alcázar.
Vuelta por al lado de la muralla, desde los miradores se ve el cementerio judío en la loma de la montaña y el paraje del Valle del Clamores. Por el camino hay varias puertas de la muralla.
Hemos salido de la zona antigua dirigiéndonos a la estación de nuevo.
La idea era ir a la Granja de San Ildefonso pero el cansancio y el calor nos han hecho coger el bus de vuelta a Madrid a las 15:30h.
He dormido por el camino y al llegar a Madrid (a las 16:30h.) estaba un poco mejor. Hemos ido en busca de la “Clínica Ruber” (en el barrio de Salamanca), pero ha resultado que la princesa no está ahí, que está en “Ruber Internacional”, a las afueras de Madrid. Pero tranquilos, voy a conseguir una foto de los periodistas esperando la primera foto del nacimiento del bebé… Digamos que es meta-periodismo. ¡JAJAJA!
Nos hemos pegado el pateo de nuestra vida caminando desde la parada de “Núñez de Balboa” hasta la Plaza de la República Argentina. Hemos visto la casa donde vivió Juan Ramón Jiménez. También hemos estado buscando la “calle de Oquendo” cruce con “calle Castellón de la Plana”. Esto ha sido otra mofa, ya que Alberto (Okendo, con K, como nosotros le llamamos), es de Castellón (bueno, Villarreal). Es un cruce con la calle Serrano y la zona está genial, con mansiones y coches de lujo por la calle. Hemos visto el CSIC, el colegio del Estudiantes (club de baloncesto), la Embajada de Costa de Marfil…
De ahí hemos ido a casa de mis chicos y Carlos y yo hemos ido a comprar. Hemos cenado juntos viendo el partido Real Madrid-Valencia CF (2-1) en la TV (queríamos comprar entradas pero se agotaron el mismo día que salieron a la venta).
Antes nos hemos acercado al Estadio Santiago Bernabéu (a 20 minutos a pie) para ver el ambiente. Al lado está el Palacio de Congresos de Madrid con un mural enorme de Joan Miró en la fachada (al lado está la sala de exposiciones que lleva su nombre).
Al acabar el partido me he ido a casa…
¡¡¡Día agotador!!!
Hola guapa:
No se si sabes que soy socorrista. La próxima vez, la solución no es el agua fría, sino poner la mano en alto (así llega peor la sangre al dedo, ergo no puede salir tanta) y hacer un semi-torniquete en el dedo. Por ejemplo, haberte apretado con una goma o un hilo bien fuerte, para que la circulación fuera aún más dificultosa. Lo del agua fría…ayuda a contraer los vasos, pero puf. poco efectivo.
ainsss, que pedorraaaaa!! Un día te me desangrarás por hacer el bobo.
Besossss
No voy a comentar nada sobre chillidos viendo el futbol o goles que solo ves tú….xDDDDDD
PD: Desde luego, sí que fue agotador el día, pero me fui feliz.
PD2: El colegio se llama Ramiro de Maeztu