El lunes pasado, el 23, fue Sant Jordi (y el Día del Libro). La verdad es que me pilló totalmente desprevenida porque durante el fin de semana anterior no preparé ningún dibujo como el año pasado. ARGH. 
Supongo que aún he de seguir acostumbrándome a que aquí, en Cataluña, Sant Jordi sea una fiesta señalada donde todo el mundo sale a la calle, compra rosas, libros y está tremendamente emocionado. No es que en Valencia no saliera a la calle o comprara libros, pero claro es que en Barcelona es diferente. 
Al ser lunes imaginaba que no habría mucho movimiento de gente por la Rambla (donde suelen poner más puestos de libros y de donde más cerca estoy), pero se me olvidó que conmigo, al salir del trabajo, también salían otros trabajadores. 
Es decir, la Rambla estuvo horriblemente llena de gente durante toda la tarde. Si permanecías en silencio por unos instantes en mitad de la acera, 
podías oír el rugido de la gente, cual dragón acabado de matar por Sant Jordi… bueno, eso si conseguías pararte en mitad de la acera, claro. El horror.
Vale, puede parecer que odio Sant Jordi tras este post chungo, ¡pero no es así! Es solo que la marabunta se concentra ese día en un punto concreto. 
Aún así pude pasar una tarde agradable entre olor a rosas y a papel y tinta… 
e incluso tener la suerte de encontrarte a escritores que amablemente conversen con sus seguidores, como Jordi Sierra i Fabra. 
También hice algo diferente: ¡este collar de fimo inspirado en la leyenda de Sant Jordi! 
A ver si os gusta:
¿Qué hicisteis vosotros? ¿Os han regalado alguna rosa? ¿Os habéis comprado muchos libros?
Claudia ,
Soy muy fan del collar. Te quedó maravilloso! <3
·M· ,
¿Conoces una colección de joyas de plata que son colgantes con su respectiva cadena, y cada colgante es un libro con el título de un clásico? A Dior pongo por testigo que un día tendré el de Sentido y sensibilidad… (es que no hay de Cumbres borrascosas…)